¿Qué pasaría si dejáramos de reciclar?
"Reciclar no vale para nada, total luego lo juntan todo”. “No tengo sitio en la cocina para meter tantos cubos”. “Ya pago el impuesto de basuras, que recicle la administración”, “No tengo tiempo para ir a tirar las bolsas en lugares distintos”. Puede que alguna vez hayas oído alguna de estas frases de boca de un amigo, familiar o conocido.
Para entender la importancia de reciclar es importante plantearse que pasaría si de un día para otro dejáramos de hacerlo.
Basurales gigantescos
En un principio si dejáramos de reciclar de un día para otro no veríamos grandes cambios en nuestras vidas, pero hay que tener en cuenta que, en promedio, cada individuo genera 2 kilos de basura por día. En la actualidad la población mundial es de casi 7.200 millones de personas, por lo que, si todos los residuos acabaran en un basural, ello implicaría que cada día se sumarían unos 14 mil millones de kilos de desechos. Por lo tanto necesitaríamos enormes extensiones de tierra para utilizar como basurales. Además cuando estos “depósitos” se llenan en exceso, la tierra alrededor puede verse afectada por los gases que crea el material en descomposición, como dióxido de carbono y metano.
Más consumo de recursos naturales
Cuando los materiales reciclables no se reciclan adecuadamente, la demanda de recursos naturales se eleva debido a la escasez de materiales reciclables entrantes. Éstos, tales como vidrio, aluminio y plástico, pueden recuperarse y convertirse en un producto completamente nuevo. Por ejemplo, las botellas de vidrio se pueden reciclar y utilizar para fabricar unas nuevas y una botella de plástico puede utilizarse en la producción de lana. Por cada árbol que se planta, se talan muchos más por lo que la tasa de deforestación aumenta más rápido que la velocidad de crecimiento de los nuevos, eso significa que, si no reciclamos, por ejemplo, el papel, nos quedaremos sin arboles en muy poco tiempo.
Cuando no reciclamos, los recursos naturales se utilizan en mayor cantidad, causando daños al medio ambiente, como la contaminación.
Contaminación
Como explicábamos en el punto anterior las grandes cantidades de basura que se acumularían en los enormes basurales generarían gases contaminantes. Además, a largo plazo estos basurales saturados darían paso a una recogida de desperdicios saturada en las ciudades y estas empezarían a acumular grandes cantidades de basura en las calles que se descompondrían ahí mismo liberando metano y dióxido de carbono.
Insalubridad y enfermedades
La basura descomponiéndose en plena calle llevaría consigo plagas de insectos y roedores, y consigo enfermedades.
Más gasto energético
Desde el momento en el que un fabricante tiene que producir algo nuevo a partir de recursos naturales en estado bruto, hay un elevado gasto de energía, y al mismo tiempo su producción es más cara. Si en vez de eso se produce el mismo objeto a base de materiales reciclados el ahorro en energía y coste es considerable.
Por estas catastróficas consecuencias y por muchas otras más es necesario reciclar. La crisis actual y alarma medioambiental sonando, es una gran oportunidad para poner a prueba nuestra conciencia sobre reciclaje.
Recordemos:
REDUCIR-REUTILIZAR-RECICLAR.
"Reciclar no vale para nada, total luego lo juntan todo”. “No tengo sitio en la cocina para meter tantos cubos”. “Ya pago el impuesto de basuras, que recicle la administración”, “No tengo tiempo para ir a tirar las bolsas en lugares distintos”. Puede que alguna vez hayas oído alguna de estas frases de boca de un amigo, familiar o conocido.
Para entender la importancia de reciclar es importante plantearse que pasaría si de un día para otro dejáramos de hacerlo.
Basurales gigantescos
En un principio si dejáramos de reciclar de un día para otro no veríamos grandes cambios en nuestras vidas, pero hay que tener en cuenta que, en promedio, cada individuo genera 2 kilos de basura por día. En la actualidad la población mundial es de casi 7.200 millones de personas, por lo que, si todos los residuos acabaran en un basural, ello implicaría que cada día se sumarían unos 14 mil millones de kilos de desechos. Por lo tanto necesitaríamos enormes extensiones de tierra para utilizar como basurales. Además cuando estos “depósitos” se llenan en exceso, la tierra alrededor puede verse afectada por los gases que crea el material en descomposición, como dióxido de carbono y metano.
Más consumo de recursos naturales
Cuando los materiales reciclables no se reciclan adecuadamente, la demanda de recursos naturales se eleva debido a la escasez de materiales reciclables entrantes. Éstos, tales como vidrio, aluminio y plástico, pueden recuperarse y convertirse en un producto completamente nuevo. Por ejemplo, las botellas de vidrio se pueden reciclar y utilizar para fabricar unas nuevas y una botella de plástico puede utilizarse en la producción de lana. Por cada árbol que se planta, se talan muchos más por lo que la tasa de deforestación aumenta más rápido que la velocidad de crecimiento de los nuevos, eso significa que, si no reciclamos, por ejemplo, el papel, nos quedaremos sin arboles en muy poco tiempo.
Cuando no reciclamos, los recursos naturales se utilizan en mayor cantidad, causando daños al medio ambiente, como la contaminación.
Contaminación
Como explicábamos en el punto anterior las grandes cantidades de basura que se acumularían en los enormes basurales generarían gases contaminantes. Además, a largo plazo estos basurales saturados darían paso a una recogida de desperdicios saturada en las ciudades y estas empezarían a acumular grandes cantidades de basura en las calles que se descompondrían ahí mismo liberando metano y dióxido de carbono.
Insalubridad y enfermedades
La basura descomponiéndose en plena calle llevaría consigo plagas de insectos y roedores, y consigo enfermedades.
Más gasto energético
Desde el momento en el que un fabricante tiene que producir algo nuevo a partir de recursos naturales en estado bruto, hay un elevado gasto de energía, y al mismo tiempo su producción es más cara. Si en vez de eso se produce el mismo objeto a base de materiales reciclados el ahorro en energía y coste es considerable.
Por estas catastróficas consecuencias y por muchas otras más es necesario reciclar. La crisis actual y alarma medioambiental sonando, es una gran oportunidad para poner a prueba nuestra conciencia sobre reciclaje.
Recordemos:
REDUCIR-REUTILIZAR-RECICLAR.